El ayuntamiento de Madrid ya se ha cansado de esta guerra entre taxistas y empresas VTC (Uber, Cabify) e impondrá una medida alternativa que no permitirá a ninguno entrar en toda el área M30. La alcaldesa Manuela Carmena afirma estar cansada de esta inestabilidad que se vive en la capital y que, además, se contradice con las nuevas medidas para mantener la ciudad libre de contaminación. No obstante, estudian métodos de transporte alternativos y parece que los ojos están puestos en la vieja Habana, donde emergen con fuerza los bicitaxis. Para conducirlos, bastará con la licencia BTP normal, por lo que cualquier taxista puede conducirlos y pasear en la tranquilidad de las bellas calles madrileñas. Otra de las ventajas sería su precio, que es muy inferior a los tradicionales, ya que el coste del combustible es inexistente.
Esta medida, de funcionar, podría extenderse a todo el territorio nacional y le vendría como anillo al dedo a Barcelona, ya que si Uber y Cabify abandonan la ciudad, se abriría un nicho de mercado que podría aprovechar la empresa Bici Taxi España SL, que ya está negociando con ayuntamientos el precio de las licencias.
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